Decorar galletas con glasa puede ser una entretenida afición, una adorable pasión o una excusa para compartir momentos inolvidables con tu madre, abuela, tus hijos o ¿porque no?: novio, marido o ¿conquista?

Si, ya casi estamos en San Valentín y esto me está efectando un poco…pero, en todos y cada uno de esos casos, desde luego puede llegar a ser un martirio si no tienes claro que necesitas y cuales son las bases.A mi misma me pasó al principio: me enamoré profundamente de la decoración de galletas pero reconozco que no tenía muy claro por donde empezar.

A pesar de que contamos con muchísima información, raras veces está centralizada y yo que tengo una mente muy ingenieril (¡que le vamos a hacer!) lo quería todo ordenadito, esquematizado, simplificado y explicado paso por paso. Y encima, en español. No pedía nada, no.

Me costó lo mío recabar información. Y ahora que la tengo, quiero compartirla contigo. Para que antes de empezar sepas de que te hablo y no des más vueltas. Sin divagaciones. Sin complicaciones. Muy esquemático todo.

¿Y cómo lo vamos a hacer?  Pues muy sencillo: con una guía básica. Serán varias entregas.

Es una guía sin pretensiones de ser la definitiva, puesto que yo estoy en continuo proceso de aprendizaje, pero si de ayudarte sin aún estas verde en este mundillo.

Y por supuesto, que se podrá ir ampliando si a lo largo de estas semanas te surgen dudas y/o quieres que incluya alguna cuestión de especial interés. Para ello, ya sabes que puedes ponerte en contacto conmigo aquí.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Por cierto, quizás no haga falta la aclaración pero…por si las moscas: le he llamado para Dummies, pero sabes que no es que te considere tonta ¡ni mucho menos! Solo he querido hacer un guiño aprovechando el éxito de la famosa serie de libros de autoaprendizaje.

Pero vamos a lo que nos interesa de verdad.

Hoy vamos a empezar por la glasa o royal icing, el ingrediente fundamental para la decoración de galletas glaseadas, con permiso de la masa (si eres nueva por aquí te recomiendo estos súper trucos para galletas perfectas).

Para prepararla sólo necesitas:

  • 11 cucharaditas (o 60 gr.) de Meringue Powder (Polvo de Merengue)
  • 1 kg. de Azúcar glass (o impalpable)
  • 130 ml. de agua

El polvo de merengue, es un polvo fino y blanco elaborado a partir de claras de huevo deshidratadas, azúcar y agar agar o gelatina.

Se puede sustituir en la misma proporción por claras de huevo deshidratadas (Mercadona las vende, por ejemplo) pasteurizadas o frescas. La equivalencia es la siguiente: 1 cucharadita de merengue en polvo + 2 cucharadas de agua = 1 clara de huevo.

El uso de las claras de huevo es una cuestión de elección personal, pero debido a que existe una pequeña bacteria muy muy c@#$%…digo molesta, llamada salmonella, yo te recomiendo prescindir de éstas.

Yo casi siempre uso el preparado para glasa de FunCakes. Sobre todo por economizar tiempo y dinero. Es rápido y fácil de preparar ya que no debemos comernos la cabeza con las proporciones de merengue, azúcar glass y agua.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Además, en cuanto al precio, es bastante más económico ya que sólo el polvo de merengue ronda los 5-7 €, mientras que el preparado los 5,50 €. Y en este caso solo debes añadir agua hasta conseguir la textura deseada.

Aún así, puedo decir que ambas opciones son óptimas y que ya dejo a tu criterio personal el uso de uno u otro.

Existen básicamente tres consistencias:

1) Consistencia de Delineado del contorno (Stiff Consistency). Es muy espesa y aunque se puede extender suele dejar una especie de pico. Tiene una textura similar a la de la pasta de dientes. Se usa para hacer los bordes de las galletas, volantes, flores, hojas o decoraciones como las del sari de mi muñeca india.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Tip 1: Si mientras la estás usando se rompe, quiere decir que probablemente este demasiado seca y debas añadir apenas unas gotas de agua. Y si quieres darle un extra de elasticidad, añade un poco de sirope o jarabe de maíz ligero (light corn syrup).

2) Consistencia Media (Medium Consistency). Se obtiene añadiendo poco a poco unas gotas de agua a la consistencia de delineado. Llamada también de los 20 segundos porque para saber si es la correcta debes pasar un cuchillo sobre su superficie, volviendo ésta a su estado original transcurrido este tiempo. Tiene una textura similar a la del yogurt y no se extiende por si sola, sino que necesitamos la ayuda de un palillo para hacerlo.

Se usa, por ejemplo, para realizar acolchados, letras o transfers de glasa.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa 3) Consistencia de Relleno (Flood Consistency). Se obtiene añadiendo aún más agua a la consistencia media y se usa para rellenar las galletas creando una fina capa.

Llamada también de los 10 segundos porque este es el tiempo que debe transcurrir para ser usada después de haber pasado un cuchillo sobre su superficie. Es lo suficientemente ligera como para extenderse por si sola pero sin derramarse por los bordes de la galleta.

También se usa para hacer la técnica del húmedo sobre húmedo y pequeños detalles, como las alas de estos patitos o las almohadillas de las patitas de los ositos que ves aquí.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Tip 2: SweetAmbs aconseja que si optas por hacer la glasa con polvo de merengue y te pasas con el agua, no añadas más azúcar glass, sino que deberás agregar una cucharada sopera de glasa de consistencia de delineado para recuperar la textura de relleno. Esto lo debemos tener muy en cuenta si queremos evitar el famoso sangrado de la glasa (royal icing bleeding), que no es más que la separación entre el azúcar y el agua lo que deja unas antiestéticas manchas en el glaseado.

Bien, dicho esto, ahora dire lo siguiente: existen otras 45.355 consistencias intermedias: que si la de los 8 segundos, 12, 14 o 16 o 18.Y así hasta el infinito y más allá. Lo cual demuestra que lo que dice Georganne de LilaLoa, otra dama de las cookies, es 100% cierto. Y cito textualmente porque merece la pena: 

“Lo que siempre debes recordar sobre la consistencia de la cobertura o icing es que ésta debe ser TU ELECCIÓN. No todo el mundo delinea el contorno de las galletas con una consistencia de 20 segundos y la rellena con otra de 10.  Algunas personas solo usan una única consistencia para ambas. Otras veces usan una de 18 segundos o una de 12. Es tu elección. Y no permitas que nadie más elija por ti. Y no te obsesiones con un solo tipo de consistencia si no te sientes cómoda trabajando con ella. Cuando encuentres la consistencia que te gusta, no te sientas como si tuvieras que seguir experimentando. Haz lo que tu quieras”

Y me parece uno de los consejos más sinceros y alucinantes que nunca haya leído u oído acerca de esto de las consistencias del royal icing. Verdad verdadera.

Dicen que la clave es la CONSISTENCIA. Yo re-formularía la frase así: la clave es TU CONSISTENCIA.

Yo muchas veces me he vuelto loca a la hora de conseguir la textura adecuada, porque no es fácil. A veces te pasas con el agua, otras con el polvo de merengue. O simplemente tienes prisa y no calculas bien.

O tienes un mal día y estas con un humor de perros y resulta que te tiembla el pulso y le echas toda la culpa a tu glasa y empiezas a repetirte cual mantra: tengo que seguir practicando hasta conseguir la textura correcta,  hasta conseguir la textura correcta, textura correcta, correcta, correcta, correcta.

Y no tendría que ser así. 

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Como muy bien dice Georgeanne: cuando encuentres la consistencia que a ti (y solo a ti) te guste, aquella con la que te sientas siempre cómoda trabajando y veas que te da buenos resultados, párate ahí. Stop con los experimentos infinitos.

Es lo mismo que con los ingredientes. Si ya has probado un par de veces con una marca y te va bien ¿para que buscar otras?  A no ser que ocurra una hecatombe zombie (todo es probable) y la marca que a ti te gusta deje de ser fabricada, ¡no la cambies!

Yo por ejemplo, uso la misma consistencia para el delineado y para el relleno: de esta manera uso un solo biberón o manga pastelera para cada color y ¡listo!. Y eso es porque me siento cómoda haciéndolo así.

Por lo tanto, la regla de oro de LilaLoa es:Dibuja una línea sobre la superficie de la glasa con un cuchillo, por ejemplo. Tan pronto como empieces a hacerlo, comienza a contar.

Cuando la marca haya desaparecido totalmente en el resto de la glasa ese es EL NÚMERO. Esos son TUS SEGUNDOS. Si desaparece en 10 segundos, pues será una consistencia de 10 segundos, si lo hace en 13, pues será una consistencia de 13 ¿claro?

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Las tres consistencias que hoy te he presentado son solo una referencia: segundo más, segundo menos, lo importante es que si quieres delinear una galleta,  la glasa no se expanda por si sola. Que si quieres rellenar se expanda pero se mantenga en los límites de la galleta.

No te frustres si ves que no la obtienes a la primera, segunda o tercera. Con la práctica (y la paciencia, porque no decirlo) obtendrás la que a ti más te guste y te prometo que a partir de ahí andará todo rodado.

La glasa la podemos conservar hasta 15 días a temperatura ambiente (si no usas huevos, eso si) o refrigerada (en nevera) hasta un mes. Pero recuerda que la consistencia nunca será la misma y probablemente con el paso del tiempo tu glasa pierda brillo o aparezcan manchas por la separación entre el agua y el azúcar.

A mi me gusta conservarla siempre en el frigo dentro de tupperwares. Observarás que con el paso de los días se irá secando, pero no pasa nada: basta con ir añadiendo de nuevo y poco a poco algunas gotas de agua hasta obtener la consistencia deseada.

Decoración de Galletas para Dummies. Guía Básica para Principiantes: La Glasa Tip 4: Marian de Sweetopia recomienda mezclar muy bien la glasa conservada en frigo para usarla nuevamente y añadir azúcar glass o agua en pocas cantidades para recuperar la textura. Aun así esto dependerá de la temperatura del ambiente y de cuanto mezcles la glasa.

Por hoy esto es todo, que no es poco.

¿Qué te ha parecido la primera entrega de esta Guía Básica? ¿Crees que es de utilidad? ¿Te gustaría saber algo específico a lo que no encuentres respuesta o información? ¿Tienes alguna propuesta? 

Escríbeme, tomaré nota. Tu opinión es súper importante para mi.