Tengo amigas galletiles que valen un potosí. O veinte.

 

Hace poco, recibí un regalazo por parte de una de ellas: un precioso pack de papeles comestibles con los cuales, no dude ni un segundo en ponerme a jugar.

Ya me conoces, había probado hasta ahora muchas técnicas: decoraciones en volumen con glasa, stencilado de cookies, brush embroidery o pintura, pero nunca me había animado con los papeles.

Lo veía tan sumamente fácil que sentía que en cierta forma estaba haciendo trampas. Y aunque todo el mundo me recomendaba que los probara, no me terminaba de hacer a la idea.

En el fondo esto es como cuando te vas de compras con tu madre: ella te dice “pruébate este vestido que te quedará bien” y tu le dices que no hasta el infinito y más allá. Pero al final decides probártelo (más bien te lo hace probar ella) y ves efectivamente que te queda no bien…¡sino de lujo!

Pues eso mismo me paso a mi con los papeles, que me enamoraron. Definitivamente.

 

También es verdad que mi amiga eligió para mi unos diseños preciosos, muy cute como dice ella.

Si nunca has probado esta técnica te la recomiendo 100%: es una manera muy fácil y rápida de darles un toque especial a tus galletas decoradas. Lo único que necesitas para empezar es:

Galletas (glaseadas o no)
Papel impreso comestible (wafer paper)
Cortador (de la forma de la galleta que quieras decorar)
Piping gel Wilton
Lápiz y pincel

El primer paso es marcar, con ayuda del lápiz y del cortador, la zona que recortarás del papel.

Yo en este caso he usado wafer paper, más fino que el papel de azúcar tradicional, al que he dado una forma simple (redonda) que ajusta a la perfección sobre mis galletas que ya estaban previamente glaseadas.

Para continuar, con el pincel toma una pequeña cantidad de piping gel y extiéndelo por toda la superficie de la forma de papel recortada anteriormente y pégala a la galleta, asegurándote de que quedan bien adheridos los bordes.

El piping gel de Wilton puedes conseguirlo en cualquier tienda de materiales de repostería creativa.

No es muy económico (unos 5 euros) pero si eres también aficionada a las tartas puedes aprovecharlo perfectamente para otras decoraciones y realizar inscripciones.

También puedes usar la receta de piping gel casero que mi amiga usa en sus galletas:

1/4 taza + 1 cucharada de sirope de maíz
1/4 taza de agua fría
3-4 cucharaditas de fécula de maíz
1/2 cucharadita de extracto de vainilla

Si prefieres evitar cubrir las galletas con glasa y pegar directamente el papel sobre éstas, tienes la opción de usar un poco de mantequilla a temperatura ambiente a modo de pegamento.

Sin embargo, yo he preferido glasearlas previamente por varios motivos: el papel tiene mayor agarre, queda completamente liso y como es semi-transparente, el fondo blanco hace que los colores de éste se vean con mayor luminosidad e intensidad.

Una vez forradas tus cookies puedes dejarlas así o continuar la decoración como he hecho yo, glaseando sobre el papel comestible una pequeña parte para pintar sobre ella o bien glasear cualquier dibujo en 2D ¡quedara igualmente bonito!

Si quieres que los bordes de las galletas queden más prolijos, realiza algún contorno como el que ves en las imágenes con glasa de consistencia stiff ¡y ya está!

Las posibilidades con los papeles comestibles son infinitas, no solo puedes cubrir tus galletas como te he mostrado yo hoy, sino que también puedes hacer flores, plumas o mil detalles para dar vida a tus cookies.

 

Y a ti ¿se te ocurre alguna más? ¿Eres amante de los papeles de azúcar o los acabas de descubrir?